domingo, 8 de septiembre de 2013

EFRAÍN GONZALEZ CONZI


 
    El 9 de setiembre de 1982 fallecía Efraín Gonzalez Conzi. Nacido el 8 de julio de 1891 había cumplido, entonces, 91 años
"...con el mismo fervor y la misma lucidez de sus años mozos. 
   Ese fervor y esa lucidez que lo llevaron, una y otra vez, a lo largo de su vida pública, a dar testimonio constante de sus convicciones democráticas y batllista.
   Militar y abogado, en un momento clave de la historia de este país, cuando se produjo el golpe de Estado terrista, supo enfrentar con inquebrantable sentido republicano el dilema que los hechos le presentaban. Militar por tradición familiar y vocación (su orgullo mayor era el brevet de piloto militar conseguido en 1918, en la Escuela de Aviación que fundara Boisso Lanza) tuvo que optar entre la disciplina formal y el superior imperativo ético; siguió éste, negándose a colaborar con la dictadura, aunque la decisión le costara las más duras sanciones castrenses y las peripecias amargas del exilio.
   Gonzalez Conzi demostraba así su lealtad con el ideario político que había abrazado desde su adolescencia y al que, en el plano intelectual, contribuiría con el aporte fundamental de "Batlle y el batllismo", editado en 1928, en coautoría con el Dr. Roberto Giúdice, texto cuyos originales corrigió el propio Batlle y que es ineludible fuente para el conocimiento y estudio del batllismo y su constructor.
PORTADA DE "BATLLE Y EL BATLLISMO",
DE EFRAÍN GONZALEZ CONZI Y ROBERTO GIUDICE
   Como parlamentario (diputado de 1942 al 50; senador de 1950 al 62), como periodista escrito (en "El Día"), como periodista oral (con su audición "Vox Pópuli", primero en CX 10, luego en CX 32) Gonzalez Conzi  fue antes que cualquier otra cosa batllista, convencido que sus acciones y sus razones tenían  siempre origen en la ideología batllista. Así actuó en el terreno legislativo con sus proyectos de ley sobre el estanco del tabaco, creación de la Caja de Compensaciones de la Industria Frigorífica, monopolio estatal de la importación de artículos de primera necesidad, de la maquinaria industrial y agropecuaria.
   Así actuó en el campo del periodismo escrito y radial, como en la campaña que realizó durante años contra el "chicotacismo".
   Así actuó en las luchas  partidarias, aunque la polémica lo llevara a enfrentar de manera severa a personalidades y movimientos de prestigio y raigambre.
   En esas luchas, como todo político, tuvo aciertos y errores, pero nunca nadie pudo poner en tela de juicio su buena fe, su desinterés personal, su convencimiento de actuar desde premisas batllistas y su inalterable fidelidad a la más definitoria de todas ellas: la democracia sentida como un compromiso vital que no acepta renuncios.
   Su última intervención política pública es demostración cabal de lo dicho. En 1980, a los 89 años, en oportunidad de realizarse el plebiscito constitucional, adhirió al NO"



   (Reseña publicada en la edición de "Correo de los viernes", publicación semanal del batllismo lista 15, bajo el título "La muerte de un batllista", el 17 de setiembre de 1982)